jueves, 27 de diciembre de 2012

Plantas Plantas: Hedera

Plantas Aunque lo más común es que nos encontremos a la hiedra como planta de exterior, existen algunas variedades de la misma familia que son empleadas como especie de interior de medidas mucho más reducidas. Éste es el caso de la hedera, bastante fácil de cuidar y de alto valor ornamental. Originaria de Europa, es frecuente encontrarla también en el norte de África y, desde la India hasta Japón, en Asia. Existen muchas variedades, pero distinguiremos principalmente entre las de hojas completamente verdes y las que las tienen manchadas en blanco o en amarillo. ¿Cómo son? Pertenecen a la familia de las araliáceas y sólo tienen siete especies, de las cuales, dos son las comúnmente empleadas para interior; las Hederas Helix, con numerosas variedades y las Hederas Canariensis. La primera de ellas muestra variaciones en cuanto al tamaño de las hojas, su forma y colorido, así podemos encontrar desde hojas con simple forma de escudo, hasta originales formas estrelladas, con la hoja completamente verde. La segunda presenta hojas de mayor tamaño y con una gama cromática más amplia. Su desarrollo es bastante rápido, llegando a alcanzar los 60 cm. de longitud. Las especies de interior nunca florecen, el resto lo hacen en primavera. Se multiplican mediante esquejes de forma muy sencilla. Lo ideal es colocarlos directamente en la maceta que los queramos cultivar, para evitar pérdidas en el trasplante. Bastará con coger tallos de 10 ó 15 cm. de los extremos y clavarlos en turba húmeda. Lo mejor es poner dos o tres en cada maceta y pulverizarlos a menudo a una temperatura de 20 ºC. No olvidar algunos cuidados básicos Lo mejor es situar la hedera en un lugar con luz indirecta. Resiste bien la sombra, aunque, en este caso, las hojas jaspeadas perderán su color y serán completamente verdes. Asimismo, los rayos de sol directo pueden dejar a la planta descolorida. El ambiente debe ser fresco, con una temperatura que oscile entre los 14 y los 18 ºC, aunque se adapta bastante bien a situaciones adversas. En invierno es conveniente no colocarla muy cerca de los radiadores, ya que no aguanta bien el calor tan directo. Si la tenemos en un lugar con calefacción, intentaremos que el ambiente de la habitación sea húmedo, para ello podemos pulverizar la planta. Durante los meses de verano realizaremos esta acción con bastante frecuencia, al menos dos veces por semana. Una buena alternativa será poner la planta sobre un cuenco con guijarros mojados. Como ya le suministramos agua mediante el pulverizado, no será necesario regarla en exceso, será suficiente con hacerlo una vez a la semana durante el invierno y dos veces a la semana en el verano. Mejorando su aspecto físico Esta especie tiene un crecimiento bastante libre. Para adecuar su forma a nuestro gusto personal, la podaremos una o dos veces al año, así conseguiremos, además, mantener los tallos fuertes y que la planta sea más compacta y densa. La estación más adecuada para hacerlo será a finales de verano o aprovechando el cambio de maceta. Este acto se realizará durante la primavera, siempre y cuando la hedera tenga más de dos años. Lo ideal es que llegado el momento pasemos nuestra planta a una maceta mayor, aunque si las dimensiones de ésta no nos lo permiten, será suficiente con sustituir 2 cm. de tierra superficial por sustrato fresco. Será bueno que la abonemos cada 15 días durante los meses de primavera y verano, con un fertilizante disuelto en el agua de riego. Las plantas también se ponen enfermas Aunque esta especie se mantiene sana fácilmente, puede sufrir algunos trastornos a los que debemos prestar atención: * Si sus hojas se presentan pálidas en verano, puede deberse a la exposición directa de los rayos del sol. Para solucionarlo lo mejor es cambiarlas de sitio. * Cuando se presentan secas y arrugadas es por el exceso de calor y sequedad. En este caso, deberemos llevarla a una habitación fresca y aumentar su humedad. * Si el jaspeado de sus hojas se vuelve totalmente verde, será debido a la falta de luz o el exceso de abono. * Un gran aporte de agua puede hacer que las hojas se pongan negras, en este caso hay que dejar que la tierra se seque entre los distintos riegos. Algunas enfermedades: * La Xanthomonas hederae es una bacteria que se presenta principalmente bajo dos formas; con manchas en las hojas, y con depresiones en el tallo. * Esta enfermedad, que puede ir acompañada o seguida de hongos que producen manchas en las hojas, es conocida como Antracnosis. En caso de que nuestra planta la padezca, evitaremos mojar el follaje. * La negrilla es un hongo de color negro que se asienta sobre la melaza que excretan las cochinillas y los pulgones. Si eliminamos estos dos parásitos, no aparecerá. Las plagas más comunes son: * Pulgones: deforman los brotes nuevos y quedan brillantes por el líquido azucarado que producen los insectos. Las pulverizaciones con agua jabonosa serán eficaces como ahuyentador. * Araña roja: se manifiesta en hojas amarillentas que tienen finos hilos a modo de telaraña por la cara de atrás. Será bueno aplicar acaricida cada 15 días hasta que esté limpia. * Cochinillas: chupan la savia de las hojas haciendo que se decoloren, se deformen y amarilleen, provocando su posterior caída. * Trips: pequeños insectos que producen con su picadura la aparición de manchas plateadas en las hojas. Otros usos de la hedera Se le han atribuido propiedades medicinales, y muchos centros de belleza utilizan sus extractos en la elaboración de cremas para reducir la celulitis. Tiene un probado efecto antitusígeno y expectorante, aunque su alta toxicidad hace de ella un remedio peligroso. Por vía externa, la decocción de sus hojas sirve para aliviar dolores reumáticos o neurálgicos, con efecto analgésico. Tiene propiedades antiespasmódicas, sobre todo a nivel bronquial, vasoconstrictoras, anticoagulantes, expectorantes y antibióticas. Si sigues estos consejos y prestas atenciones a las modificaciones de tu planta, podrás conservar la hedera durante muchos años.

viernes, 21 de diciembre de 2012

Yuyos Arce palmatum, evolución

Yuyos
Cuando se compró este arce (acer palmatum) en un vivero era un plantón con una forma muy rara, dos ramas en forma de 'v', una maraña de ramas ..... tenía tronco bonito, pero las ramas eran desconcertantes.



Se hizo una poda drástica, pero seguía quedando una forma de "tirachinas" antiestética total.




Se suprime la rama de la izquierda y cambiar el ángulo de plantado para intentar formar el árbol a partir de la rama de la derecha. Ahora está transplantado en una maceta de entrenamiento.

Ese verano el ramaje está como se ve al dejarse crecer libremente.

El invierno siguiente se le poda más, se deja tal como se ve con un ramaje básico y se alambra. Un consejo, cuidado con dejar el alambre más de 6 meses puesto que el arce crece muy deprisa y pueden quedar las marcas del alambre.




El árbol va cogiendo la forma que se pretende poco a poco.



Se ha defoliado y está como se vé (ahora tiene las hojas más pequeñas y las ramas más finitas. Todavía queda mucho camino, pero haber conseguido este cambio en 1 año y medio no está mal.



3 meses después.


Se le transplanta a una maceta de entrenamiento para que engrose un poco y se le corta el ápice para corregir las ramas de la parte alta. El ángulo de plantado que se vé va a ser el que se le dé en el próximo transplante, y quizás con maceta de bonsai incluido.




domingo, 9 de diciembre de 2012

Increibles Creación de Tanuki paso 1

Increibles El tanuki es un animal, que aparece en la mitología japonesa y realiza engaños y travesuras. En Bonsai el tanuki habitualmente es una madera muerta a la que se le agrega una planta tratando de producir una unidad entre ambas.
  1. Esta es una rama de Quenoa (disculpas si no se escribe así), árbol originario del Norte de Argentina, elegí esta ya que es muy tortuosa y de madera muy dura.
  2. Primero con gubias fui acentuando las curvas y los jin de la madera, e inicie la canaleta por donde colocaría la planta ( en este caso un Junipero Chinensis.)
  3. Con el minitorno agrande la canaleta por donde pondría la planta, como verán envolví el cepellón con bolsas y ajuste con cinta de embalaje, para poder manipularla cómodo.
  4. Pinte con polisulfuro de calcio para que adquiera el típico color blanco de la madera muerta y aparte para que se preserve.
  5. Coloque unos precintos para ajustar el árbol a la madera.
  6. Coloque tornillos pequeños, y luego los cubrí con pasta cicatrizante.

Cuando el árbol muestre síntomas de evolución (brotes en exceso) lo alambrare y modelare.


domingo, 2 de diciembre de 2012

Planta más sabinas

Planta

Estas son unas sabinitas que tengo por casa (estoy estudiando a tope por lo que me es dificil postear de calidad jajajaja)

sábado, 1 de diciembre de 2012

Jardin -EL HUERTO DEL CURA

Jardin


'EL HUERTO DEL CURA' JARDÍN ARTÍSTICO NACIONAL


EL PALMERAL DE ELCHE

En el término municipal de la ciudad de Elche existe la mayor concentración de palmeras de toda Europa, calculándose entre 200.000 y 300.000 el número de las mismas.

Hay bastante unanimidad en aceptar que el origen de este palmeral es Fenicio, lo cual haría suponer que la existencia de las palmeras datileras en Elche se remonta a unos 2.000/2.500 años.

Es muy probable que los dátiles formaran parte de la dieta fenicia durante sus travesías marítimas; así debieron encontrar en nuestra tierra el hábitat adecuado para su desarrollo y crecimiento.

Por otra parte, la parcelación, ordenamiento, riego y cultivo de la palmera se remonta a la época de la dominación árabe.

La singularidad y la belleza paisajista del palmeral de Elche convierten al mismo en un parque natural único en el continente europeo.


EL HUERTO DEL CURA

Dentro de este marco singular y situado en el mismo casco urbano de Elche, se encuentra el Huerto del Cura, crisol donde se funde el amor al trabajo del hortelano levantino, con esa chispa de genio, que por la belleza, tienen los habitantes de esta tierra.

En Elche se denomina huerto a una parcela de tierra de menor o mayor extensión, plantada de palmeras. Cada huerto suele tener un nombre alusivo a los propietarios o a cualquier anécdota histórica. El Huerto del Cura debe el suyo al capellán José Castaño Sánchez, que fue el cura propietario hasta el año 1918.

El Huerto del Cura es de dimensiones modestas: tiene escasamente 13.000 metros cuadrados y en él viven alrededor de 1.000 palmeras. Se puede considerar un huerto densamente poblado de datileras, protagonistas indiscutibles junto a cultivos típicos de la zona.

Además de palmeras, crecen en este jardín otros cultivos típicos del Mediterráneo español, como limoneros, naranjos, granados y azofaifos, junto a otros de clima subtropical que a través del tiempo, han ido confeccionando una bella colección de plantas procedentes de los lugares más diversos.

Una de las zonas que actualmente despierta más interés entre los visitantes del Huerto es la Rocalla, que cuenta con una excelente colección de cactus y plantas crasas, propias de las regiones más secas de nuestro planeta y que se han adaptado a esta tierra.

'La Palmera Imperial' es el motivo de la popularidad que tiene el Huerto del Cura (aparece ya citada en la guía turística Baedeker del año 1908). Su nombre se debe a la Emperatriz Elisabet de Austria (Sissí) a quien se la dedicó el capellán Castaño cuando aquella visitó el Huerto en el año 1894.

Este ejemplar de palmera es único por su grandiosidad. Su rareza estriba en que los hijuelos que generalmente nacen en esta especie al pie de los ejemplares jóvenes entre 10 y 15 años de edad, surgieron aquí cuando la palmera madre tenía más de sesenta años y a una altura nada común de 1,50 mts. Sobre el suelo, con una singular sincronización de tiempo y altura que formaron el gran candelabro vegetal que es hoy y que constituye un ejemplar realmente raro entre las palmáceas.

Este formidable candelabro de ocho brazos sobrepasa con mucho las 10 toneladas de peso, alimentándose exclusivamente con la savia que proporciona el tronco central. Su edad es de 165 años, a lo largo de los cuales, las diferencias de crecimiento y grosor de los hijuelos se han hecho patentes.



DATOS DE INTERES
DIRECCION: Porta de la Morera, 49
ELCHE (ALICANTE)
TELF: 965451936